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  • Hugo Cabrera

Joel Merino: el cronista del Tepeyac



Puebla, Puebla; 16 de octubre 2020. "No creo en la virgen de Guadalupe, en la Iglesia, para mí los milagros de fe y dogmáticos no se dan, ni soy devoto. Soy biólogo y lo que hice fue documentar un fenómeno social". Así inicia la plática con Joel Merino, el equivalente a un veterano de guerra de la fotografía.


Originario de Tehuacán, ha integrado diversas agencias de noticias internacionales y nacionales. En el año de 1999 documentó por primera vez el recorrido de la antorcha Guadalupana en la ciudad de Nueva York. Con el paso de los años, registró el evento haciendo una decena de viajes por 8 estados de México y 13 de los Estados Unidos, por donde migrantes mexicanos transitan. El recorrido tiene origen en la basílica de Guadalupe y destino en la catedral de San Patricio. Se trata de una iniciativa de la organización de mexicanos migrantes llamada Tepeyac.


"Quise cubrir el evento también por una cuestión de discriminación en Estados Unidos, un asunto de racismo. Hace 20 años, en un viaje a Orlando, Florida, con un amigo querido que fue fotógrafo en el diario Reforma, tuve una plática en donde le dije que tenía un hermano en New York y que me había contado de una procesión a la virgen de Guadalupe, y que la gente de raza negra, puertorriqueños y los de Santo Domingo, los apedreaban y boicoteaban. Fue ese el detonante para planear el viaje".


"Para ese entonces se sabía de una instancia que se formaba, de nombre Tepeyac, y que en diciembre organizaría una procesión. Yo tenía muchos conocidos en New York, en particular a una señora de nombre Amparo Morales, quien tenía un departamento y beneficios de trabajadora del Ayuntamiento de alcaldía de New York. Era responsable del edificio y nos ofreció hospedaje.


'Nos vimos el 11 de diciembre, quizá de 1989, en New York. Yo iba de México y él de Orlando. Quedamos de vernos en el aeropuerto y de ahí fuimos a dejar las cosas a casa de Amparo, luego buscamos la iglesia de San Lucas, al sur de Bronx, vimos cómo le cantaron las mañanitas a una imagen. Nosotros sin saber, de pronto un paisano de Piaxtla, que trabajaba en un restaurante de bocadillos frente a la ONU, me dijo que se había formado una asociación de mexicanos en Manhattan, devotos de la virgen, y que harían la primer carrera guadalupana. Ya se había conformado en septiembre la organización Tepeyac, tenían un edificio en la 14, entre la 7 y 8, había una iglesia. Ahí dormimos esa noche, en las oficinas. El 12 de diciembre llegó el obispo de Tlapa, Guerrero, y entonces registramos la primera carrera. Eso quedó en mi primer libro: Tepeyac en New York."


Los recorridos

“Recuerdo el primer recorrido: les apagaron la antorcha en el ferri. Pasaron por la alcaldía de New York. Me hice amigo de Juan Vélez, que tenía a su cargo la liga de futbol. El director de Tepeyac siempre me trató despectivamente. Igual como soy, lo mandaba por 'las cocas'. Yo seguí viajando para cubrir la antorcha tres años seguidos. Me hice de amigos del Bronx, y luego fui a una marcha del 5 de mayo también.

'Los de Tepeyac organizaron una carrera binacional, Antorcha Guadalupana, por ahí de 1997. La financiación era un problema, que se resolvió vendiendo uniformes. Cada corredor pagaba y se solventaba la alimentación. Cuando caen las Torres se suspenden las carreras. Tepeyac en ese año ya tenía un programa de asistencia. Hacía talleres de redacción, fotografía. La liga de futbol es un tema importante. Tengo registro de la clausura de la liga con los campeones. Al norte de Manhattan, hay un islote, junto a las vías del tren. Ahí están los campos de juego.

'Tengo registro de muchas actividades del Tepeyac y nunca me financiaron. Eso me dio libertad de documentar lo que yo quisiera y no depender."



El libro

La edición del libro se hizo en el año 2002, constó de mil ejemplares y Joel Merino dice que no supo el paradero de los negativos fotográficos. La experta en temas de migración, Adriana Sletza, ha redactado los prólogos de las tres obras de Joel Merino. La portada es una foto histórica: la imagen de un peregrino con las Torres Gemelas en el fondo. El libro solo se presentó en Nueva York. Joel dice: "Antes iba dos veces por año, es una ciudad que me gusta mucho. El año pasado no fui, éste no creo vaya".


Fuerza de Tepeyac

"Ya no hago tantos pleitos. Seguí retratando el recorrido de la antorcha, hice viajes de México a New York, visitaba a la salida en la basílica, en la frontera. Son 8 estados los que se recorren: Morelos, Estado de México, Guerrero, Oaxaca, Puebla, Hidalgo, Tamaulipas, Tlaxcala y Ciudad de México. Al final de cuentas, es muy triste ver a gente en la montaña, que salen ofreciendo flores del campo, acercándose a la gente a darles 20 pesos a los corredores. Es gente que tiene creencias, que tiene 20 años sin ver a sus hijos. Antes, los migrantes eran gente pobre del campo. Ahora hay universitarios que migran.


'Nací en México y he tenido las condiciones para vivir como quiero. Tengo una hija en Washington. No creo que lo que haya visto haya modificado mi forma de ver la vida.

'He escuchado testimonios de personas que se perdieron en el desierto, y me decían que cuando sentían lo peor, solo quedaba encomendarse a la virgen de Guadalupe.

'Ahora haya otro fenómeno en la Mixteca, y son los ninis que tienen una tiendita y ni siquiera la atienden. Cuando entra un cliente es cuando se asoman al negocio, porque no hacen otra cosa; lo que mandan los hermanos es suficiente para vivir bien.



'Conozco a una persona de Piaxtla, de 19 años, que no va a la escuela. Se compra una moto para pasear, ya sin necesidad de nada. Antes, terminaban la primaria y se iban. Ahora se pueden quedar a hacer nada. Uno de los programas de Tepeyac era enseñar inglés, el examen de admisión era pasar la frontera, el desierto, al menos con eso podían pedir huevo y café en algún rancho.


'Tepeyac era un trabuco. La gente, la forma de ser de algunos, fue acabando la organización. Tepeyac le dio voz e imagen a los migrantes, que primero eran de Puebla, luego de todo México. El acceso a la educación, salud, y que fuera legal para los migrantes en su condición, fue tarea de Tepeyac, que se mantenía por donaciones. Yo recuerdo haber estado en una reunión en la ONU, organizada por Tepeyac que llegó a tener más fuerza que el consulado mexicano".


Dos publicaciones

Joel Merino publicó dos libros más: Antorcha Guadalupana. México New York y Migración binacional: 20 años; Antorcha Guadalupana: 16 años.


"El año 2017 fue desastroso para mí; llegando a Virginia, siguiendo a la antorcha, me sentí mal y tuve dos infartos que me provocaron regresar. En el 2018 en la misma zona me sentí muy mal de nuevo, no completé la ruta. Hay muchas historias que quisiera fotografiar, el problema es el tiempo y el dinero".



Por Hugo Cabrera, de Subterráneos para PUEBLAYORK

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