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  • Francisco Herrera Coca

Ya no estoy aquí



La música y el baile han sido, desde tiempos antiguos, un motivo de reunión y una forma de identificar a aquellos que se parecen a nosotros. A través de la música y el baile establecemos complicidades, creamos tribus urbanas que luego son bautizadas por otros con nombres como raperos, reggaetoneros, darketos o punks.


A una de estas tribus, en el Monterrey de la década pasada, pertenece Ulises, el protagonista de la película “Ya no estoy aquí”, escrita y dirigida por Fernando Frías. Ulises pertenece a una subcultura que escucha un tipo de música que ellos llaman “Kolombia”, en alusión al país, Colombia, pero también a una de las grandes aportaciones culturales de esa nación sudamericana: la cumbia. Y es justo la música una de las fortalezas de la película, un soundtrack que poco a poco se ha vuelto de culto gracias a las cumbias nostálgicas de Lisandro Meza y Andrés Landero.



Ulises y los Terkos, su pandilla, alejados de la música norteña y el hip hop que dominaban la escena regiomontana, igual que varios jóvenes hicieron suyas las cumbias colombianas y el vallenato; nació así un nuevo estilo, las Kolombias o el Cholombiano. Vestidos como cholos californianos y equipados con un tambor y un acordeón desarrollaron un estilo de baile único, uno que se baila a solas en el centro de un círculo, más similar a las “retas” hiphoperas que al baile de pareja típico de las fiestas mexicanas.


Pero las Kolombias no se escuchan en su versión original, aunque también se puede; se oyen “rebajadas”; es decir, un DJ altera la velocidad para hacerlas sonar más lentas y con voces más graves. Entra aquí otra subcultura clásica en México: la de los sonideros.

Ulises y los suyos son marginales en muchos sentidos. En primer lugar, porque viven en las colinas que rodean la metrópoli regiomontana; en sus fiestas al aire libre, en suelo de tierra y rodeados de casas con techos de lámina, se divisa a los lejos la ciudad moderna, llena de edificios lujosos a donde ellos pocas veces se aventuran a viajar, de la misma manera en que los citadinos difícilmente se aventurarían a las colonias peligrosas donde estos adolescentes bailan y forman sus pandillas.


Son los mismos cerros de donde décadas atrás salió el hijo pródigo de la escena musical regia, el recién fallecido Celso Piña, amante de la cumbia y el vallenato, apodado el rey del acordeón.


“Ya no estoy aquí” es el segundo largometraje del director mexicano Fernando Frías. La cinta fue estrenada en el Festival Internacional de Cine de Morelia el 20 de octubre de 2019 y se ha convertido en uno de sus grandes éxitos en 2020. Ganó el premio principal en el Festival Internacional de Cine de Morelia y arrasó en la entrega de los Arieles, los galardones a lo mejor del cine mexicano.


La historia sucede en dos tiempos, el presente de Ulises, muy lejos de casa, en la ciudad de Nueva York, hogar de tantos migrantes mexicanos, y en paralelo nos cuenta lo que sucedió meses atrás, en sus últimos días antes de abandonar Monterrey.


Es la historia de un mexicano en un país extraño, donde nadie habla su idioma, que no es un español cualquiera, sino el español de su barrio, lleno de jergas y modismos que no aparecen en el diccionario de quienes estudiaron el idioma en la high school estadounidense.



Ulises, como muchos migrantes, añora su tierra, su tribu, su música y a su pandilla. Mientras deambula por las calles neoyorquinas se maravilla al ver a los afroamericanos bailar hip hop, pero sabe que solo, por allá nomás no se puede.


Pero "Ya no estoy aquí" no es sólo la historia de un migrante que viaja de México a Nueva York, es también acerca de los últimos días de un México que fue acribillado por las balas cuando el expresidente Felipe Calderón le declaró la guerra al narcotráfico. Dicha guerra fue una revuelta que dejó una larga estela de sangre por todo el país, pero que fue particularmente cruel con zonas como el noreste de México al provocar la fragmentación de cárteles y los violentos ajustes de cuentas en plena calle.


Fue una guerra que borró de golpe a los cholombianos y sus bailes, pero que revive con intensidad durante casi dos horas en esta película.


Ya no estoy aquí está ahora disponible en la plataforma de Netflix.


Ya no estoy aquí (México 2020)

Guion y dirección: Fernando Frías

Edición: Yibran Asuad

Fotografía: Damián García

Reparto: Juan Daniel Garcia (Ulises), Xueming Angelina Chen (Lin), Coral Puente (Chaparra), Adriana Arbelaes (Gladys), Leo Zapata (Isai), Jonathan Espinoza (Jeremy)



Francisco Herrera Coca para PUEBLAYORK

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